Día 9: La espera
Hay tiempos que no pueden apurarse, "el jueves salía todo mal", o salía todo como debía salir.
El mural satura, conspira, se te viene encima y la medusa se enreda donde no debe. Los muralistas tienen que descansar de Dabura y se van temprano.
El viernes, día 9, estaba Dabura solito, esperando a sus creadores, desconcertado. En sueños llegará la inspiración para retomar la obra... hay tiempos que no pueden apurarse...
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